Transcurre el tiempo inexorablemente. Adentrados de lleno en la Pascua, echamos la vista unas semanas atrás con el propósito de poner; negro sobre blanco, unos cultos celebrados en honor y gloria de nuestro Sagrado Titular, el Señor Resucitado, que pasarán a los anales de nuestra historia.
Aún no se había puesto el sol entre las lomas de la Sierra de San Miguel, cuando la luz de la tarde del Sábado Santo, se hizo luz de Pascua de Resurrección. La Noche Santa de la Vigilia Pascual se adelantó unas horas a causa del toque de queda. Con una Parroquia llena de fieles con el aforo permitido en el Nivel 3 de alerta sanitaria, el párroco, Don Gonzalo comenzó a entonar el Pregón Pascual y anunciar a los fieles congregados en el templo que Cristo había resucitado de entre los muertos.
Nuestros hermanos de junta Alberto Burgos Fornelio y José Antonio Uceda León, participaron en las ofrendas llevadas hasta el altar.
Ya en la medianoche del recién estrenado Domingo de Resurrección, los hermanos y devotos salieron a sus balcones o ventanas con la vela votiva para seguir siendo testigos y alumbrar, desde este rincón del mundo,el camino de luz de El Resucitado en esta recién estrenada Pascua.
Amaneció un nuevo Domingo de Resurrección. Sigue siendo todo diferente. Ausencias y encuentros. El Señor Resucitado no amaneció en su paso de caoba y plata sino en el Altar Mayor, en el centro del mismo altar de cultos montado para celebrar el Domingo de Resurrección y posterior la Octava de Pascua de Resurrección.
A las 11:30 horas celebramos la Misa Solemne de Resurrección. La Santa Misa fue oficiada por el párroco de Santa María de la Asunción, poniendo los cantos litúrgicos Cristina Gallego Rivero. Momentos previos de recibir la Solemne Bendición del Sacerdote, Don Gonzalo pronunció una breve semblanza, a propósito, de la presentación de la orla de cultos de nuestra A.Parroquial, que fue diseñada y pintada, como ya se ha referido en anteriores publicaciones por Antonio José Medina Vallecillo, quién asistió a la Santa Misa en compañía de su amigo y escultor Fernando Murciano.
Así mismo, una vez concluida la Misa, dos miembros de la Agrupación Musical Nuestro Padre Jesús Nazareno de la localidad sevillana de La Algaba y que en condiciones normales hubiera puesto sus sones tras el Señor Resucitado, tuvieron a bien ofrecer a nuestro Sagrado Titular un centro floral despositándose a los pies del altar. De igual modo la querida Hermandad del Cristo del Amor de Constantina, nos envió un centro de flores para el Señor Resucitado.
En el exterior de la Parroquia, se montó un ventorrillo con recuerdos, estampas, medallas del Señor Resucitado, así como la puesta al cobro de recibos y entrega del anuario El Alfa y Omega, editado por nuestra A.Parroquial, para recordar el 2020 un año extraordinario por todo lo acontecido.
Siendo las 13:30 horas se procedió a dar comienzo a la Veneración y rezo de las Estaciones del Vía Lucis, en sustitución de la tradicional procesión del Domingo de Resurrección. Dicho culto, se llevó a cabo por turnos; el primero de ellos estuvieron presenteslos hermanos costaleros; estos fueron convocados por los capataces en la Plaza de España, con las pertinentes medidas de distanciamiento social e higiene, haciéndoles entrega de una lámina en recuerdo a su labor para con esta A.Parroquial.
A continuación accedieron a la Parroquia para Venerar al Señor Resucitado y meditar con el rezo de la 14 estaciones del ejercicio del Vía Lucis. Al finalizar el rezo, Gema García Morente y Puri Muñoz Criado desde el coro, pusieron la nota musical a la liturgia de la Veneración.
En el segundo turno de Veneración acudieron los hermanos de grupo de benefactores del Señor Resucitado, que pudieron asistir, los hermanos y devotos de grupo de donantes del juego de candelería de altar del Señor Resucitado, compuesto por hermanos y miembros de los grupos de la cruz de mayo y caridad a los que, igualmente se les entregó, en la Plaza de España, una lamina en agradecimiento por su aportación en cada una de las causas y hermanos que había solicitado su reserva de hora. Seguidamente, pasaron a la parroquia para proseguir con la Veneración.
En el tercer turno siguieron acudiendo hermanos y devotos hasta completar el aforo permitido. Para finalizar nuestro hermano José Antonio Uceda, entonó el canto del Salve Madre a la Santísima Virgen del Carmen para despedir el turno de oración durante la veneración al Señor Resucitado y dar por finalizado estos cultos en un Domingo de Resurrección atípico, siendo el sentir de todos el anhelo a la normalidad esperada y deseada. No obstante, este año pudimos reunirnos en nuestra Parroquia y meditar y celebrar la Resurrección de Nuestro Señor, causa principal de nuestra fe.
En breve amplia galería del Domingo de Resurrección de 2021.
Paz y Bien.