martes, 20 de junio de 2023

- A LA MEMORIA DEL PADRE EDUARDO (1944-2007)-

Hoy, martes 20 de junio, en vísperas de cumplirse un trienio de la  apertura de la exposición del Señor Resucitado previamente a la Solemne bendición, para nuestra Agrupación Parroquial esta fecha está señalada en el calendario ya que se cumplen dieciséis años del fallecimiento del querido y añorado Padre Eduardo.

Más de tres lustros  desde aquel 20 de junio de 2007 cuando para siempre alcanzaste la vida eterna en el lugar donde habitan los santos. Tú, sin duda, eras uno de ellos.

Todos los años, desde que faltas físicamente entre nosotros, ponemos en valor, a través de esta semblanza,  aquel  infausto día  marcado en el calendario. Aquella jornada del  20 de junio se recuerda triste y luctuosa. Guadalcanal amaneció abatido por la trágica noticia. El Padre Eduardo había fallecido. Su persona era muy querida entre sus feligreses y vecinos en general. Para nosotros fue, en vida, uno de los impulsores de la actual Agrupación  Parroquial, cuando por enero de 2003 aquellos jóvenes, encabezados por Juan Cantero y Alberto Burgos, proponen al Padre Eduardo dar culto a Cristo Resucitado. A partir de ese instante caminamos de la mano en las actividades a desarrollar. 

Son muchos los recuerdos que se agolpan en la memoria de los tiempos que, junto a tu persona, tuvimos a bien compartir. Tú anhelo ,como aquellos hermanos fundadores, fue el de crear una Hermandad entorno a Cristo Resucitado. Así lo dejaste negro sobre blanco en la carta fundacional. No concebías que la gran Semana Santa de Guadalcanal quedará vacía sin la proclamación pública de la Resurrección del Señor. Así nos lo inculcaste y así lo tendremos que conseguir con la ayuda del Señor y el esfuerzo de todos los hermanos/as, pudiendo ya decir que dicho grupo fue nombrado  Agrupación Parroquial en enero del presente año.

Por último, como todos los años queremos pedirte que desde el cielo sigas iluminado el caminar de tu niños del Resucitado. Un camino de verdad y vida. Intercede por la que fue tú comunidad parroquial, en especial a esta Agrupación Parroquial que viste nacer de la nada y que ahora caminamos de la mano de Don Aniceto en este peregrinaje en la fe.

Siempre presente entre nosotros.

Paz y Bien en la preciosa Sangre de Cristo.